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Guía de compra

¿Cuál es el mejor calentador? Existen varios factores que debes tener en cuenta antes de realizar tu compra. En las siguientes líneas te explicamos los tipos de termos disponibles, sus características, usos y otros elementos importantes que te ayudan a seleccionar el aparato más ajustado a tu perfil.

Los calentadores se pueden agrupar teniendo en cuenta el combustible que usan y, también, su tipo de tecnología.

Tipos de Calentadores según el combustible que usan

  • Calentadores a gas: Son los que para su funcionamiento generan la energía calórica por medio de la combustión de gases como el propano, butano o gas natural. Vas a encontrar calentadores de agua a gas natural, para que los conectes directamente a la red y calentadores de butano/propano (GLP) de cámara abierta, para los que necesitas comprar bombonas de gas.
  • Calentadores eléctricos: Son los que calientan el agua por medio de resistencias eléctricas, muy utilizados en lugares de bajo consumo de agua. Se distinguen a su vez en calentadores instantáneos, que van sin depósito,  y acumulativos, cuyo depósito puede variar en su capacidad desde 10L hasta 200L.
  • Calentadores solares: Este tipo de calentadores son autónomos, es decir, para la generación de calor aprovechan la energía de la radiación solar por medio de paneles solares térmicos, que calientan el agua de forma ecológica.

Y ahora, para saber cuál es el calentador que más te conviene, debes responder a las siguientes preguntas:

¿Qué tipo de combustible usas en casa? ¿Gas o electricidad?

¿Cuánta agua caliente necesitas?

¿Cuentas con un sistema de energía solar térmica?

¿Dónde se va a colocar? ¿De qué espacio dispones?

¿Tienes instalación de tuberías de agua caliente?

¿Puedes evacuar los humos?

¿Qué caudal de agua tienes? ¿Cuál es su presión?

¿Cuántas personas estamos en casa?

¿Cuántos baños hay?

¿Qué calentador de agua comprar?

Todas las interrogantes anteriores las tienes que estudiar con antelación antes de comprar un calentador de agua específico, así que vamos a examinar estos aspectos importante con detalle.

Tipo de combustible

A la hora de instalar el calentador que necesitas debes decidir qué tipo de combustible llevará. Por ejemplo, si quieres de los que funcionan con gas, debes tener una instalación de tuberías de gas. Además de saber si el gas que llega a tu casa es natural o butano, aunque la mayoría de los calentadores funciona con ambos tipos.

Para los que funcionan con energía solar tienes que disponer de una instalación de paneles solares.

Se podría decir que los más fáciles de instalar son los que funcionan con electricidad, ya que no requieren ningún otro tipo de instalación, aunque son los que más gastan al mes.

Aquí te dejamos una guía de los tipos de calentadores que hay.

La cantidad de agua que necesitas

Debes saber el consumo de agua caliente que tienes para poder satisfacer tu demanda. Según el tipo de sistema que uses, se pueden calentar entre 5 y 20 litros por minuto.

Así que debes comprar un  modelo que te ayude tener siempre el agua que necesitas, tomando en cuenta que, en promedio, un grifo puede liberar 9 litros por minuto y para una ducha, el gasto es de 25-30 litros.

Capacidad

La capacidad es una de las variables  fundamentales que debes vigilar antes de adquirir un calentador. Se estima que cada consumidor promedio, utiliza aproximadamente de 30 a 50 litros de agua al día.

Este dato va a depender de la frecuencia con la que se use el agua caliente. También influye el número de personas que viven en casa.

Es de suma importancia que hagas un cálculo, en función de las características de tu hogar y de vuestros hábitos de consumo.

Aquí te dejamos una guía de cómo elegir un calentador dependiendo de la capacidad.

Donde lo vas a instalar

Saber dónde lo vas a colocar es muy importante. Ya que vas a necesitar una salida de humos si instalas un modelo a gas o asegurarte de que el espacio es suficiente para el tamaño del tanque acumulador, si te decides por este termo eléctrico. 

Pero no solo eso. Considera también la distancia hasta los grifos, por si necesitas aislar las tuberías para conservar el calor y ahorrar energía. La evacuación de líquido en los calentadores eléctricos acumulativos también depende de ello, tomando en cuenta que ésta puede ser natural (por medio de la gravedad) o forzada.

Termos horizontales, verticales o reversibles

Antes de seleccionar un diseño en específico, es imprescindible que hayas decidido en qué lugar vas a instalar tu calentador. Toma medidas del espacio y asegúrate de que está lo más cerca posible de los lugares que demandan más uso de agua caliente.

Encontramos modelos para instalación vertical, horizontal y reversibles. estos últimos pueden instalarse en ambos sentidos.

Te recomendamos el tipo vertical, ya que es uno de los más comunes y eficientes. Gracias al diseño es imposible que existan derrames de agua. 

Los modelos horizontales puede ser una gran alternativa cuando tienes un espacio limitado para instalar el calentador. Ahora bien, debido a esta posición, el termo consume más energía y calienta menos el agua.

Hay marcas en el mercado que fabrican modelos reversibles, que pueden instalarse en ambas posiciones. Sin embargo, los últimos estudios confirman que presentan una gran serie de inconvenientes que podrían no resultar nada rentables para el cliente, entre ellos, la posibilidad de fugas de agua.

Es por ello por lo que coincidimos que la mejor opción para comprar un calentador eléctrico, son los de tipo vertical. Son más rentables y seguros..

Resistencias envainadas o blindadas

El tipo de resistencia se selecciona en función del agua que tengas en tu domicilio.

Las resistencias blindadas se recomiendan para las aguas blandas, debido a que transmiten el calor de manera directa.

Para las aguas duras o con alto contenido de cal, recomendamos las resistencias envainadas. Este tipo revestimiento no está en contacto directo con el líquido. El impacto de la cal disminuye, aunque ofrecen un mayor tiempo de respuesta para calentar el agua.

Elegir el tipo de resistencia adecuada influye directamente en el rendimiento del equipo y su durabilidad.

Ánodo de magnesio

Su objetivo principal es evitar la corrosión de los componentes metálicos del termo que están en contacto con el agua. Se encarga de almacenar la cal que contiene el agua para evitar que los depósitos cristalinos que esta forma, puedan oxidar la cuba del termo. Un termo con ánodo de magnesio suele tener una mayor vida útil que los que no lo tienen.

Es importante que el ánodo de magnesio esté ubicado lejos de la resistencia, para asegurar su utilidad. Tendrás que cambiarlo cada tres año, o al año si en casa tienes aguas duras.

Función programable

Un termo que cuente con opciones de programación te va a ayudar a hacer un uso eficiente del producto y a reducir el consumo. Lo mismo podemos decir de la regulación de la temperatura.

Con la función programable, el termo sólo se activa cuando necesitas el agua caliente y apaga la resistencia durante la noche.

Te recomendamos elegir un modelo con temperatura regulable, ya que así podrás elegir la temperatura del agua que quieres dependiendo de tus preferencias y teniendo en cuenta la época del año. Por ejemplo, en invierno seguramente querrás generar agua más caliente, pero en verano seguramente querrás tener una temperatura más baja, algo que también te ayudará a ahorrar más energía.

Está demostrado que ambas características te permiten ahorrar hasta un 20% de energía.

Calentador a gas

En términos generales, un calentador a gas es más aconsejable para hogares con más de 6 habitantes ya que tiene un consumo menor de energía y por lo tanto, resulta más económico. 

Necesitan para funcionar 0.25bar de presión y un caudal mínimo de unos 3 litros por minuto. En zonas de aguas duras y con mucha cal, las membranas para medir el caudal se ensucian y se atascan y necesitan mucha más presión y caudal. En los manuales de funcionamiento, los fabricantes detallan los requisitos de cada aparato.

Tip: Si tienes el problema de que el agua te salga hirviendo, y al mezclar el agua te salga fría, es porque al mezclar no llega a esos 3 litros/min.  Para solucionarlo tienes que bajar la llama del calentador al mínimo, para que salga a la temperatura más parecida a la que vas a usar en la ducha. Este problema es normal en casi todos los calentadores de gas sin llama modulante ni control de temperatura.

Los calentadores de gas impactan en la factura a tu favor, dada la reducción del importe mensual. Tienes agua caliente de modo ilimitado y participas activamente en el cuidado del medio ambiente. Cuando los instales, verifica la adecuada evacuación de gases.

Los termos a gas pueden estar reforzados con un sistema antiheladas y un ventilador para el tiro forzado que permite la salida de los gases quemados al exterior, y con un sistema que bloquee el calentador al detectar que el ventilador funciona de una manera incorrecta o existe una obstrucción de gases. Esta línea de productos es una de las más populares porque ahorra hasta en un 20% el gas y hasta un 35% el agua, frente a los dispositivos clásicos. 

Además, ten en cuenta que los calentadores para la producción de agua caliente son de dos tipos: de caldera (o cámara) abierta y cerrada.

Una caldera abierta tiene una llama piloto visible y se caracteriza por tener una corriente de humo natural. La caldera tipo cerrada es más moderna, se caracteriza por tener una cámara sellada, por lo que no se puede ver la llama. Para espacios muy cerrados son recomendables los de caldera abierta.

Al igual que todos los aparatos de producción de energía y calor, los calentadores de agua a gas también garantizan el mejor rendimiento con un mantenimiento adecuado a lo largo del tiempo. Recuerda que la limpieza regular de las boquillas y el control de los humos es esencial para minimizar las emisiones de gases al aire.

Calentador de gas butano

Este termo está integrado por una tubería de cobre (el serpentín) por la que circula el agua, y que es calentada directamente por las llamas producidas por un quemador de butano. Cuando se enciende y se abre el grifo, el agua circula por el serpentín y sale caliente. El gas butano, o el propano, se almacenan en bombonas.

Calentador de gas natural

A diferencia del equipo anterior, este calentador no tiene una unidad de almacenamiento de gas. En este caso viene distribuido por tuberías externas de alimentación propia que tienen las casas. Es quizás uno de los más eficientes porque no es necesario esperar a que el agua se caliente, por lo que también ayuda a ahorrar en consumo.

Termo eléctrico o calentador eléctrico

Los termos eléctricos son ideales para viviendas con 4 integrantes, para aquellos hogares que se encuentran lejos, y para los que no cuentan con las instalaciones que requieren los calentadores a gas. A diferencia de los calentadores a gas, no necesitan un caudal mínimo para activarse y no requieren bombonas de butano o instalación de gas.

Este tipo de calentadores son muy eficientes y potentes y puedes olvidarte por completo de los problemas asociados a las posibles fugas de gas. Todos ellos cuentan con elementos que reducen la utilización innecesaria de electricidad.

En este caso, el sistema usa una resistencia eléctrica para calentar el agua, la cual se encuentra dentro del depósito de almacenamiento. De esta manera, cuando el agua ha llegado a la temperatura deseada se apaga. Este es un sistema efectivo y de rápida acción, pero hay que controlar el consumo eléctrico, que varía mucho en función de la capacidad del tanque.

Para elegir el modelo de calentador eléctrico que mejor se adapte a tus necesidades, te recordamos algunas consideraciones:

  • Elige la capacidad de agua suficiente a utilizar durante el día, según el consumo de tu familia y el tiempo de calentamiento.
  • Cerciórate del lugar en el que se va a instalar. Lo ideal es que esté cerca de donde se usará el agua caliente y en un sitio que encaje bien.
  • Debes conocer el tipo de agua que hay en tu vivienda, si es dura o blanda, ya que de esto depende el tipo de resistencia que debe tener para un mejor rendimiento.
  • Identificar si la temperatura es fija o regulable, incluso los hay que pueden programarse y con esto controlar sus funciones.
  • Con aislamiento y recubrimiento, que evitará la pérdida de calor y favorecerá un bajo consumo.
  • De alta eficiencia energética, te recomendamos aquellos que tienen valores de A+++, A++, A+, B y C, que son los más eficientes.

Calentador de agua instantáneo

Los calentadores de agua instantáneos no están provistos de un tanque en el que se acumula el agua para calentarse después. 

Se ponen en funcionamiento al abrir los grifos y calientan el flujo de agua de modo constante conforme pasa por su interior. Aun así, el flujo de agua es compacto y la temperatura es regulada por sensores incorporados al equipo.

Son perfectos si tienes un espacio muy limitado. Dentro de esta categoría encontrarás los calentadores portátiles sin depósito y los termos residenciales sin depósito. 

Los portátiles te permiten transportarlos al campo, en el coche o a una segunda vivienda, y son adecuados para bañar a las mascotas y los animales, o para proporcionar agua caliente en aquellos sitios donde no hay instalaciones de agua, como cabañas en el campo, camping y autocaravanas. 

Los residenciales son equipos de tamaño muy reducido que se conectan directamente a la tubería de agua y que se instalan debajo del fregadero o lavabo, o en la misma salida del agua en el baño. 

Están hechos para una instalación en el sistema central del suministro de agua, por lo que está garantizada una distribución única de agua caliente a diversos puntos de toma de agua al mismo tiempo.

También se dividen según su potencia, que va desde 1,32 GPM para 5 L, hasta 3,18 GPM para 12 L en los residenciales.

Si escoges estos modelos, sus ventajas se centran en su práctico diseño y sus funcionalidades, ya que se trata de un sistema continuo e inmediato.

Calentador de agua acumulativo

En el caso de este tipo de modelos, es preciso tener en cuenta la capacidad de los mismos ya que, según su tamaño, depende la cantidad de agua que almacenan. Su tamaño es mayor que los instantáneos, por lo que requiere de ciertas condiciones para una instalación y funcionamiento adecuados.

La capacidad de almacenamiento de estos calentadores eléctricos varía según los modelos, y depende de tu consumo que requieras depósitos con más litros o menos. Son uno de los calentadores más comerciales. 

Necesitan de un tiempo dependiendo del volumen del tanque y de la potencia y se pueden colocar en cualquier lugar de la casa, ya que mantienen constante la temperatura del agua. Por esta razón, generalmente es aconsejable instalarlos directamente en el baño para reducir los tiempos de llegada del agua, ya que no desperdician agua, al salir caliente desde el primer momento.

Se trata de una cuba para recoger agua y calentarla después. Mientras que el agua es utilizada, automáticamente el tanque se llena con otra porción de agua fría. Este tipo de sistemas incluyen sensores para mantener la temperatura adecuada.

En el interior están equipados con una resistencia eléctrica, que se encarga de mantener el agua caliente. Cuando ésta llega a la temperatura indicada, la resistencia se apaga y el material aislante del depósito ejerce la función de mantenerla caliente.

El termo eléctrico, ya sea horizontal, vertical o reversible, debe mantenerse limpio, alejado de humedades que puedan dañar los cables eléctricos y se ha de cambiar el ánodo de magnesio cada 3 años. Si el termo no es de alta calidad o si la dureza del agua, es alto, debe cambiarse cada año. 

Recuerda que tienes que considerar el tipo de tuberías de tu edificación, la cantidad de miembros del hogar que lo utilizarán, la rapidez con la que precisas el agua caliente y el consumo de energía.

Calentador solar

Los calentadores de agua solares usan un sistema de tuberías de vidrio que está sellado al vació, que calienta el agua que en ellas se encuentra. Es un sistema ideal si te encuentran en lugares donde abunde el sol.

El calentador solar es una de las versiones más novedosas en los calentadores porque es amigable con el medio ambiente. Su función de calentamiento solar permite ahorrar entre un 60 y 75% de la energía eléctrica. 

Viene integrado con una placa solar que recoge las emisiones solares y las redirecciona hacia un generador de energía que alimenta el tanque que almacena el agua.

¿Cómo elegir el mejor calentador?

Como ya has podido ver, son muchas las circunstancias a tener en cuenta antes de elegir el mejor calentador para tu casa.

Para saber cuál de estos elegir lo primero que tienes que hacer es definir las funciones, el alcance que tendrá el calentador de agua en atención a las personas que estáis en la vivienda.

Otro aspecto que te recomendamos inspeccionar es el entorno de la casa, porque si se vive en una zona boscosa donde la luz del sol es poca o nula, no conviene comprar un calentador solar.

Las características internas de la vivienda también cuentan para definir una compra inteligente. El tipo de cableado e instalaciones eléctricas que tenga tu vivienda marcan la potencia del calentador que puedes instalar.

El número de personas que habitan en la casa es otro factor que se debe tomar en cuenta en el momento de comprar un calentador porque esto va directamente relacionado con el tiempo de uso y la capacidad de agua que puede almacenar.

Resumiendo, no olvides tener en cuenta estos aspectos clave:

  • Compara la cantidad de agua caliente que necesitas, mide el flujo del grifo y según esa cantidad de litros por minuto elegirás la capacidad exacta.
  • Ten en cuenta el lugar donde vayas a colocarlo, especialmente los modelos eléctricos con depósito que necesitan espacio y ventilación.
  • En caso de que tengas un sistema solar térmico deberás introducir algunos accesorios para regularlo.
  • En el caso de los portátiles asegúrate que el tamaño sea adecuado para llevar en tu vehículo.

De acuerdo con nuestra experiencia, cada uno de estos elementos permitirá elegir el modelo perfecto que mejor se adapte a tus necesidades.